Es una de las nuevas
revelaciones del genero urbano, su nombre es Mileisha Nicole Merced Ramírez,
nació un 26 de junio de 2001 en el Hospital Pavía en Puerto Rico. Sus padres
son Jeisha Ramírez y Miguel Merced y tiene cuatro hermanos.
Actualmente, Zarimar
trabaja para una compañía de ventas en línea. Además de componer canciones,
considera que su voz suena como si viniera del cielo, pues entiende que es un
regalo de Dios. Sus frases favoritas son “chao”, “ok” y “dique que dique”.
Su infancia fue una de las más “brutales”, ya
que disfrutaba de correr bicicleta, jugar al esconder y pillo y policía. Le gustaba gritar bien fuerte a la guagua que
vendía mantecados por su casa, escribir con tiza en la calle, era de los juegos
que más disfrutaba, y hacer guerras con sus hermanos y amigos con bombas de
agua. Uno de los momentos que recuerda en detalle, fue cuando tenía cuatro años y se trepó solita al
techo de la casa de su abuela, fue muy traviesa.
Desde pequeña siempre
quiso ser cantante, actriz y bailarina, aprovechaba cualquier oportunidad para
entretener en las fiestas familiares, cumpleaños para cantar, bailar y ser el
centro de atención.
Se graduó de la escuela
superior East River High School y le gustaría completar estudios en sonografía.
Durante sus años en la escuela fue que descubrió sus dotes para la música. Uno
de los modelos en su vida fue su tío que murió de cáncer, durante este proceso
de duelo descubrió que uno de sus talentos era cantar y pudo transformar un
momento trágico en algo positivo, pero su modelo a seguir es Dios.
Entre sus hobbies están
escuchar música, en los momentos en que se encuentra triste es cuando más le
surge la musa para escribir sus temas musicales. Le motiva su abuela y las
cosas positivas que le están pasando.
Se considera extrovertida,
se lleva bien con las personas, es muy llevadera y nunca tiene problemas con
nadie. Una de sus metas en su vida es ser cantante y servir de ayuda a las
demás personas a través de su música, ya que eso es algo que ha influenciado su
vida y le gustaría influir de forma positiva en la vida de otros.
Anhela marcar un
precedente en el genero urbano, tener paz mental y emocional.